domingo, 30 de abril de 2017

Con la ley por el camino de la ley

30 DE ABRIL DE 2017


Intolerable poder sobre las leyes

No existe asunto más insoportable que el poder mofándose de las leyes.
El estoico Marco Tulio Cicerón, un siglo antes de Cristo, ya exhortaba al habitante que “El buen ciudadano es aquel que no puede tolerar en su patria un poder que pretende hacerse superior a las leyes”.
Dos milenios después, sigue siendo intolerable aunque el poder ya no es lo que era.
Para Moisés Naím, el poder se está degradando, fragmentando. Según la tesis del escritor de El fin del poder y columnista venezolano, nacido en Libia en 1964, ya no manda más quien es más grande o más fuerte sino aquellas pequeñas organizaciones o micropoderes con repercusiones globales.
Itaipú es uno de ellos
De empresa binacional, con la misión de generar energía limpia y barata, hoy es un poderoso ente financiero que, para la promoción de los gobiernos de turno, se pasa construyendo todo tipo de obras, becando estudiantes, repartiendo ambulancias hospitalarias, automóviles y motocicletas policiales.
Vulnerando disposiciones del Anexo “C” del Tratado de Itaipú, que prohíbe el lucro, este micropoder se prodiga en asuntos ajenos a su competencia y más propios de un Estado Nacional.
Con el lucro indebido, camuflado en el rubro gasto social, Itaipú atiende a una formidable clientela política que, a la par, le sirve de sostén a sus órganos de su administración y a sus bien remunerados gerentes.
Ellos, sus administradores, sabedores de la ilicitud, una vez más, sorteando temerariamente la competencia del Congreso y en el afán de formalizar los gastos sociales –que no son parte del costo del servicio de electricidad– alteraron la misión de Itaipú con agregados de tareas ambientales y de responsabilidad social.
Mofándose de las leyes para sus beneficios y gobiernos socios, con el dinero mal habido subsidian a la sospechada de corrupta Eletrobras, la otra propietaria de la binacional hidroeléctrica, más interesada en el bienestar de sus accionistas que en la indigencia de su propio pueblo.
Temerariamente elevan hasta la estratósfera el costo del servicio de electricidad y encarecen artificialmente la tarifa de cada unidad de electricidad que deben pagar puntillosamente los consumidores, sus víctimas propiciatorias.
Para mantener vigente la república y desactivar este omnímodo micropoder, asociados con el crimen organizado y permanente fuente conspiración para someter a las Altas Partes Contratantes o Estados condóminos, es hora de que la fiscalía y la Contraloría General de la República investigue Itaipú.
La policía federal, la fiscalía y los jueces brasileños ya están trabajando por su lado. Hoy en lista de espera Eletrobras y su conexión con la binacional hidroeléctrica.
Con la investigación del “Lava Jato” ya se tiene preso a decenas de empresarios brasileños y a políticos variopinto.
Sus esquirlas ya impactaron en Argentina, Colombia, Venezuela, Perú, Ecuador, República Dominicana y cunde la desazón.
Pero lo más importante es el inicio de un proceso regional para deshacerse de la corrupción liderado actualmente por el notable presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski, un singular estadista.
Mutante
De ente binacional, con la misión de generar energía limpia y barata, hoy es un poderoso ente financiero para la promoción de los gobiernos de turno.

domingo, 9 de abril de 2017

Ninguneando a Sachs

09 DE ABRIL DE 2017

| JEFFREY SACHS

Apalancando la causa paraguaya en Itaipú

El “Leveraging Paraguay’s Hydropower for Sustainable Economic Development” o “Apalancando la Hidroenergía de Paraguay para el Desarrollo Económico Sustentable”, documento de 111 páginas, es también conocido como Informe del Vale Columbia Center (VCC) o más resumidamente como el Informe Sachs.
El Informe se centra en la recaudación y en la gestión de los ingresos que pueda asegurar a Paraguay la capacidad de financiar una estrategia de desarrollo a largo plazo.
En ese sentido, Paraguay había exportado 887 Terawatt (887.000 GW) de electricidad a Brasil entre 1985 y 2012. Una verdadera fortuna, aunque supuestamente no ha pagado aún su parte de la deuda por la represa de Itaipú.
Recomendaba al nuevo Gobierno, conforme al estudio, que la historia de la deuda de Itaipú y las condiciones de reembolso deben ser reexaminadas en cooperación con Brasil y tal vez con la asistencia del Fondo Monetario Internacional o las Naciones Unidas.
El estudio aseguraba que, una vez revisado los reembolsos realizados hasta la fecha, había razones suficientes para creer que Paraguay esencialmente ya canceló sus deudas. También destacaba que: 
- El precio justo de la energía que cede Paraguay a Brasil sería el precio mayorista de las compras de electricidad por parte de los distribuidores en el mercado de San Pablo. Considerando la situación en el año 2012, el precio mayorista de la electricidad en Brasil se estimaba en US$ 85.000 por gigawatt hora. 
- El costo del capital del proyecto por gigawatt hora debería ser calculado como el servicio de la deuda a ser cancelada en el 2023. 
- El cálculo del servicio de la deuda estaría US$ 31.200 por gigawatt hora. 
- El promedio del costo de operación y mantenimiento, en el año 2010, estaba estimado en US$ 12.170 por gigawatt hora. 
- El costo de transmisión quedaba estipulado en US$ 4.400 por gigawatt hora.
Entonces, la ecuación –que el Ing. Luis María Fleitas Vega denomina como el de la equidad– para determinar el importe de la compensación por cesión de energía y de royalties, correspondientes al Paraguay quedó construida de la siguiente manera:
85.000 – 31.200 – 12.170 – 4.400 = 37.230 
US$ 37.230 es el total por gigawatt hora que se debió abonar a Paraguay en concepto de compensación por cesión de energía y royalties en el 2012.
Sin embargo solo recibió US$ 14.410. Como compensación se le pagó US$ 9.350 por GWh y por royalties US$ 5.060 por GWh.
“Dado que Paraguay exportó 32.805 GWh a Brasil, la diferencia entre US$ 37.230 y US$ 14.410 por GWh equivale a una pérdida de rentas para Paraguay de US$ 748,6 millones solamente en 2012” (Informe Final Sachs, ABC Color, pág. 2, 18 diciembre 2013).
En resumen: 
US$ 37.230 – US$ 14.410 = US$ 22.820 
32.805 GWh x US$ 22.820 = US$ 748.610.100. 
Agregamos que la pérdida de utilidad ocasionada al país entre el 2012 y 2017, cinco años, rondaría unos US$ 3.743 millones.
La contundencia del estudio del equipo de expertos del Vale Columbia Center, con la supervisión de Jeffrey Sachs, no deja lugar a dudas.
Hace décadas explicaba que el Paraguay “ha sido dramáticamente subcompensado por sus exportaciones de electricidad al Brasil desde el inicio de Itaipú.
Por ejemplo, antes de 2011, los pagos de compensación a Paraguay eran solamente de US$ 3.064 por GWh (a precios de 2012)”. Afirmaba, que “durante todo ese periodo, la suma de royalties y compensaciones fue consistentemente muy baja, evidentemente muy por debajo de un precio justo de mercado para las ganancias de las exportaciones de Paraguay”.
Destacaba también, que “Si se calculara cuidadosamente, la pérdida de ganancias en Paraguay resultarían en miles de millones de dólares”.
Desde la firma del Tratado en Itaipú en 1973, el país sufre una degradante discriminación en el aprovechamiento hidroeléctrico, que solo es propicio para el Brasil. Nuestras autoridades se limitaron a ser observadores pasivos del infortunado latrocinio.
A los escasos compatriotas que se atreven a reclamar públicamente trata de opacar la próspera clientela de Itaipú. A veces, presentados como radicales o patrioteros, estos insumisos no se postran ante la égida brasileña.
Hoy, a pesar de que el atronador campanazo del informe elaborado por Jeffrey Sachs y su equipo resuena con más fuerza, sigue sin alterar la prolongada siesta gubernamental.
Jeffrey Sachs, un notable estadounidense, al igual que Martin T. McMahon, Rutherford B. Hayes, Lyndon B. Johnson, Dean Rusk y otros más, no escatimaron sus esfuerzos en promover, a través de la historia, la justicia de la causa paraguaya.
juanantoniopozzo@gmail.com