domingo, 29 de noviembre de 2015

El Gobierno nacional no puede seguir ignorando sus derechos en Itaipú

29 DE NOVIEMBRE DE 2015

| LOS INFRUCTUOSOS RECLAMOS DE 2008 (II)

Brasil aún controla la entidad para sus fines

Antes de pasar a considerar los otros temas faltantes, en la segunda reunión de la mesa negociadora del 27 de octubre de 2008 fueron planteados:
- Cero deudas o su máxima reducción, con el objetivo de bajar el costo de la energía, considerando que el 62,8% del costo del servicio de electricidad estimado para el año 2009 sirvió para amortizar los préstamos.
- Itaipú, de negocio eléctrico pasó a negocio financiero, pero no de Paraguay.
- Los recursos creados por la usina debían aplicarse en su mayor parte al desarrollo económico, etc.
- La eliminación de la deuda disminuiría el factor de presión sobre la tarifa futura.
- La eliminación de la deuda pondrá término a los atrasos de las obras presentes, etc.
- Para la cogestión se encomendó al Consejo de Administración encontrar la solución.
- Para la fiscalización conjunta se convino establecer un relacionamiento entre ambas Contralorías para unificar criterios o realizar auditorías complementarias en las jurisdicciones de cada país.
- Para las obras faltantes se decidió hacer un seguimiento a través de los ministerios respectivos con la participación de la ANDE y direcciones de la entidad. (ENRÍQUEZ GAMÓN, Efraín. Itaipú Binacional en una nueva dimensión histórica. Editorial Arandu. 2009)
Conviene destacar que la responsable de analizar la deuda, la Comisión de Entes Binacionales Hidroeléctricos (CEBH) dependiente de la Cancillería nacional, fue la primera en advertir que la deuda sobredimensionada de Itaipú ya fue totalmente honrada. Más tarde, en el 2013, fue corroborado por el Informe Sachs.
En la segunda reunión también se coordinó:
- Que en el próximo encuentro participen los ministros de Minas y Energías y de Obras Públicas y Comunicaciones;
- Que a mediados de diciembre de 2008, en la cumbre presidencial, sea entregado a los presidentes el Relatorio de lo tratado y
- Que la delegación brasileña en la próxima reunión presente las propuestas y contrapropuestas que respondan al reclamo paraguayo, fundamentalmente las tres primeras reivindicaciones: libre disponibilidad, precio de la energía y la deuda.
La delegación brasileña aprovechó la reunión para cuestionar el exceso de personal paraguayo en la entidad a lo que la delegación paraguaya respondió que los gastos del personal en la margen izquierda, si bien menos numerosos, eran superiores a los de la margen derecha.
Ante la relativización brasileña sobre la importancia de Itaipú, que solo aportaría el 19% del total de la demanda brasileña, se contestó que no se puede desconocer que “el corazón económico (financiero e industrial del Brasil) el estado de San Pablo y el pulmón turístico, cultural y político del país (Río de Janeiro y otros Estados aledaños) dependían del más del noventa por ciento de la energía generada por la Itaipú Binacional. Por tanto, la disposición de esa energía era vital, determinante, insustituible a corto y mediano plazo” (p. 55).
“… Y de estas bondades y de estos beneficios ha venido disfrutando, disponiendo, nuestro socio condómino, el Brasil, por más de cuatro lustros” (p. 57).
En la misma página del libro de Enríquez Gamón se puede leer una dura crítica a los gobiernos anteriores “erráticos y complacientes”. Muy diferentes al que él ahora servía con devoción:
“… y porque en el pasado inmediato se han sucedido en el país gobiernos erráticos y complacientes, sin planes nacionales de desarrollo con objetivos y metas definidos en beneficio de la comunidad nacional”.
La reacción de Osvaldo Bergonzi, director del semanario político “El Colorado”, no se hizo esperar. Muy molesto, publicó el 24 de febrero de 2010 un artículo titulado: “¿Sufres de amnesia, Efraín Enríquez Gamón?”.
El escrito, en una parte, le preguntaba: “¿Cuál fue tu aporte para corregir los males del coloradismo que ahora denuncias cuando ocupaste cargos importantes durante tantos años? ¿Qué hiciste para subsanarlos? Nada. Solo cobrabas tu sueldo cada fin de mes”.
El propio Enríquez, ciudadano convencional en el año 1992, férreo opositor a la enmienda de la Constitución Nacional para la reelección presidencial de Nicanor Duarte Frutos, al igual que otros convencionales que hacían de consejeros en las binacionales por orden de Lugo, el intento de enmendar la Constitución Nacional para la reelección de Fernando Lugo no le causó parecida reacción. En fin, una cuestión de ubicuidad, que según el escritor Stefan Zweig forma parte de cierta tipología política.
Durante las conversaciones siguió ausente el director general paraguayo doctor Mateo Balmelli.
a. La tercera y última reunión de la mesa negociadora
Se realizó el 19 de diciembre de 2008. A las comitivas se sumaron los ministros de Minas y Energía del Brasil y de Obras Públicas y Comunicaciones del Paraguay; el director general de la Eletrobrás y los equipos técnicos de apoyo de ambos países.
Haciendo una pequeña digresión, cabe señalar que el director de la Eletrobrás, Valter Cardeal de Souza (director de Planeamiento e Ingeniería de la Eletrobrás), del equipo brasileño de negociación del 2008 y brazo derecho de la presidente Dilma en el sector eléctrico, está acusado de cobrar “propinas” (coimas).
Veja, en julio de 2015, respecto a la delación premiada de Ricardo Pessoa, dueño de la empresa UTC, informó que, según Pessoa, la negociación del contrato de construcción de la usina Angra 3 sirvió para que Luiz Valter Cardeal cobrase del consorcio de constructoras “donaciones” para el PT.
Retomando la tercera reunión, se mencionó que en la reunión anterior las conversaciones técnicas afectaron el tratamiento formal de los puntos originales y se decidió que los puntos del Memorándum sobre la libre disponibilidad de la energía, el análisis del pasivo y el precio justo por la compensación queden sujetos a la decisión política de los gobiernos, en el más alto nivel (Es decir, comentamos, a las calendas griegas).
En el tercer encuentro debían ser definidos los siguientes puntos:
- El avance de la cogestión plena de la empresa en igualdad de condiciones (lo que es irracional habida cuenta que la direcciones técnica y financiera, inamovibles, controlan el Brasil);
- El permiso a los entes de control (Contraloría) de ambos países para auditar a la Empresa Binacional Itaipú, tanto en la margen derecha (Paraguay) como en la margen izquierda (Brasil), de tal modo que exista transparencia en la administración de la Empresa (Contrariando el blindaje jurídico confeccionado a la medida por nuestra Corte, a pedido de los presidentes de turno del Ejecutivo, sin el menor interés en el escrutinio público. Solo resta, para desenmascarar a los bandidos, el Tribunal de Cuentas de la Unión que decidió recientemente intervenir Itaipú).
- La terminación de las obras faltantes (no concluidas), tales como la construcción de la estación seccionadora, el mirador en la margen derecha, la extensión de las redes de transmisión de la energía de Itaipú para su consumo en el Paraguay.
- La potenciación del Parque Tecnológico Industrial (PT) en la parte paraguaya; y
- La revisión de estudios originales hechos con anterioridad para proyectar el canal de navegación sobre el río Paraná. (Hasta hoy otra utopía por la inutilidad de nuestros representantes).
b. Resultados de la tercera reunión
- Los principales temas pasaron a nivel gobiernos.
- No fueron cuestionados la modificación del Tratado las veces que convenían a los intereses brasileños para demostrar que la tesis “pacta sunt servanda” –lo pactado obliga– es aplicado solamente al Paraguay.
Ejemplos:
El producto de la usina que se comercializa desde el año 2002 ya no es la potencia, sino la energía, contraviniendo el parágrafo único del Artículo XIII.
La compensación desde el año 1986 dejó de incluirse en el costo de servicio de la Itaipú, modificando el Artículo XV, parágrafo 3º.
Los recursos complementarios no son aportes, son préstamos con elevados intereses usurarios, al margen del Artículo IX, etc.
En el conocimiento de la imposibilidad del retorno de la energía paraguaya se imponía otras alternativas a ser instaladas en las negociaciones. Por ejemplo la compra del excedente por la ANDE para su reventa en el mercado brasileño y el cumplimiento del Artículo XIII del Tratado que faculta a la ANDE la adquisición de la mitad de la energía adicional a la garantizada, muy barata.
c. Opiniones sobre el resultado de las reuniones
- El coordinador de Entes Binacionales Hidroeléctricos (CEBH) Ing. Ricardo Canese, a fines de abril de 2009, en un artículo titulado “Soberanía hidroeléctrica paraguaya”, dio una versión hasta optimista del resultado de las negociaciones:
“En cuanto a las negociaciones, ha habido avances importantes en los tres últimos puntos (cogestión, control y obras faltantes). En los tres primeros puntos, el Brasil aceptó que la Contraloría General de la República del Paraguay audite la deuda binacional de Itaipú (lo que significa un avance en el tratamiento del tema de la deuda, tercer punto) y al mismo tiempo ofreció duplicar los ingresos paraguayos por la exportación de electricidad al Brasil (avance en el segundo punto), valor que fue rechazado por el Paraguay como insuficiente”.
“En cuanto a la soberanía hidroeléctrica (primer punto), es donde no hay avance alguno”. Siguió diciendo:
“Itamaraty se empeña en negar la soberanía hidroeléctrica paraguaya. El actual ministro de Minas y Energía del Brasil, Lobão, del sector conservador del PMDB, ha afirmado días pasados que “el Paraguay puso solo el agua” y que, por lo tanto, no puede exigir soberanía sobre su energía de Itaipú.
(Es preciso aclarar que) La energía hidráulica es un recurso más limpio y valioso que el petróleo. Decir, por ello, que el Paraguay pone solo el agua, como despreciando este aporte para justificar la pérdida de soberanía, es como decir “Venezuela pone solo el petróleo” y por ello no puede reclamar nada (de su propio petróleo), no puede tener soberanía sobre sus hidrocarburos. Sería impensable que Petrobras, si quiere explotar yacimientos de hidrocarburos en Venezuela, se atreva a sostener semejante despropósito en Venezuela, por más capital que ponga. Lo que tiene valor son los pozos de petróleo y no el capital que pueda poner una empresa (que cualquiera lo puede hacer)”.
“Igualmente dijo que lo que vale en Itaipú es el potencial hidroeléctrico paraguayo y no el capital que puso Eletrobrás. Además, si esta hubiera puesto un financiamiento concesional –extraordinariamente conveniente o (blando)– se podría concluir que hubo un aporte adicional genuino del Brasil que algún derecho (no la soberanía paraguaya) le podría otorgar”.
“Ello, sin embargo, siguió señalando, no fue así. Eletrobrás puso un capital extremadamente costoso y perjudicial (tasas de interés muy por encima de las tasas Libor o Prime rate) a Itaipú Binacional. Tal aporte de capital ha redituado muchos beneficios a los accionistas (privados y transnacionales en un alto porcentaje) de Eletrobrás. Esta empresa promocionó la venta de sus acciones en la bolsa de Londres publicando una foto de Itaipú –como si fuera propia– en el Financial Times.
También publicita Eletrobrás su propiedad sobre Itaipú en la Bolsa de Nueva York para vender a mejor precio sus acciones, aunque en este caso aclara –con una nota al pie y letras chicas que pocos leen– que Itaipú también es del Paraguay. En definitiva, no es que Eletrobrás le hizo un favor a Itaipú (en un 50% al Paraguay) al financiar la obra, todo lo contrario, Eletrobrás lucra incluso abusivamente (al desconocer al Paraguay como su legítimo propietario, en un 50%) gracias a Itaipú, utilizándola como su principal activo para valorizar sus acciones”. Agregamos nosotros, la deuda de Itaipú con la Eletrobrás ya fue suficientemente honrada.
Finalmente, de los seis puntos reclamados nada se consiguió. Solo la retórica inconducente, para tontos, de Itamaraty.
Brasil sigue controlando la entidad binacional para sus fines a través de la Eletrobrás, socia corrupta de la ANDE, a la vista y paciencia de nuestros gobiernos de turno cada vez más vendepatrias.
Deuda
La CEBH, dependiente de la Cancillería nacional, fue la primera en advertir que la deuda sobredimensionada de Itaipú ya fue totalmente honrada.
Control
Brasil sigue controlando la entidad para sus fines a través de Eletrobrás, socia corrupta de la ANDE, a la vista y paciencia de nuestros gobiernos de turno ...
Bolsa
Eletrobrás promocionó la venta de sus acciones en la bolsa de Londres, publicando una foto de Itaipú –como si fuera propia– en el Financial Times.
juanantoniopozzo@gmail.com

sábado, 21 de noviembre de 2015

Corruptos e ignorantes negociadores

22 DE NOVIEMBRE DE 2015


Los infructuosos reclamos del 2008 (I)

a. Antecedentes
La redacción del Tratado de Itaipú fue manejado al margen de la opinión pública. Con suma discreción, los negociadores paraguayos se adecuaron a las pretensiones de sus similares brasileños en contra de los intereses de la nación.
La prudencia rasgo distintivo de la diplomacia, si bien es necesaria para tratar delicados asuntos internacionales, en los gobiernos autoritarios cuando la opinión pública le es adversa apelan al secreto de Estado para evadir el control público.
Los principales medios de prensa, “La Tribuna” y “ABC Color”, forzando el margen de tolerancia imperante, advirtieron sobre el enorme perjuicio que ocasionaría al país la ratificación parlamentaria del documento acordado por cancilleres de Paraguay y Brasil el 26 de abril de 1973.
No obstante, la reacción de los opositores, las manifestaciones de protesta de los intelectuales, estudiantes, obreros y ciudadanos en general no alcanzaron para detener la aplanadora parlamentaria oficialista que lo ratificó convirtiéndolo en Ley de la Nación el 17 de julio de 1973.
Después de 1989, los sucesivos Gobiernos no tuvieron inconvenientes en seguir conviviendo con el perjudicial Tratado de 1973, un mamotreto fuera del compromiso entre gobiernos suscrito en el Acta de Foz de Yguazú de 1966. Lo que en realidad convenía eran las generosas dádivas distribuidas como “beneficios del cargo”. Entre tanto, el “statu quo” no debía ser alterado.
b. Público reclamo
Las protestas de la opinión pública no se hicieron esperar exigiendo equidad y cogestión paritaria. Comenzaron antes de la ratificación parlamentaria y con mayor énfasis después de 1989. El diario ABC Color, antes y después, no paraba de reclamar con irrebatibles argumentos los pisoteados derechos de la margen derecha.
Durante la larga transición hacia la democracia, se dictaron numerosas conferencias con especialistas y estudiosos del tema. En Asunción; en Resistencia, Argentina; en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional, en Universidades privadas, en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional. También en numerosos centros de estudios universitarios del interior del país; en la Casa Paraguaya de Buenos Aires, en Puerto Yguazú, etc.
Comunidades paraguayas en el extranjero también se manifestaban a favor de la recuperación de la soberanía energética. Resalta entre ellas, la realizada frente a la ONU, en Suiza, el 26 de abril de 2009. También, en la misma fecha, coincidente con el 36º aniversario de la firma del Tratado, numerosos paraguayos protestaron frente a la embajada brasileña de Asunción y consulados brasileños de Nueva York, Washington, París y Buenos Aires.
Pese a la indiferencia de los gobiernos, la causa Itaipú se fue instalando como un ineludible tema de discusión.
c. Planteos puntuales
Fernando Lugo Méndez, destituido por el Congreso en junio de 2012, como parte medular de su campaña para ganar su inconclusa presidencia incluyó en su agenda la recuperación de la soberanía energética en Itaipú. Esta causa nacional, la recuperación de la soberanía energética, promovida sin descanso por el diario ABC Color, debatido permanentemente en su Suplemento Económico y años de insistente prédica editorial tuvo resultados. Se pudo comprobar que el pueblo se identificaba con la idea cuando el 15 de agosto del 2008 consiguió que Fernando Lugo se instale en la primera magistratura de la nación.
En mayo de 2008, el Gobierno entrante conformó un grupo de estudio energético que planteó la necesidad de revisar el Tratado de Itaipú, sus Anexos y Actas Reversales.
Fue elaborado un listado de seis puntos:
1) La soberanía energética o libre disponibilidad de la energía que corresponde por derecho al Paraguay;
2) El “precio justo” que debe pagar el Brasil por la energía cedida;
3) El pasivo o la deuda de Itaipú;
4) La administración paritaria o cogestión plena de la entidad Itaipú Binacional;
5) La fiscalización por los organismos de control de ambos países para transparentar la gestión económico-financiera y
6) La terminación de las obras faltantes o inconclusas en la margen derecha.
Los seis puntos fueron puestos a consideración del presidente brasileño Luis Inácio Lula da Silva quien envió al Paraguay a su asesor para Asuntos Internacionales, Marco Aurelio García con una comitiva.
El 1 de agosto, García se reunió con Efraín Enriquéz Gamón vocero oficial de la comitiva paraguaya conformada por Ricardo Canese, Asesor para temas energéticos; Carlos Mateo Balmelli, nominado para director general paraguayo en Itaipú; Carlos Cardozo, nominado para director paraguayo en Yacyretá y Emilio Camacho, nominado para Asesor Jurídico del Ejecutivo.
Para Marco Aurelio García “ese encuentro abría no una ventana sino una gran puerta que nos conducía a un nuevo escenario en donde se focalizarán las relaciones entre Paraguay y Brasil, y más allá del tema Itaipú”. También expresó “que los seis puntos planteados no son excluyentes de otros, concomitantes o complementarios, tales como asistencia financiera para proyectos conjuntos, incluso comerciales y de frontera, etc.”.
Para el asesor de Lula “las ideas expuestas verbalmente, como el contenido del documento, como las llaves para dar el primer paso y servir de soporte a decidirse en el más alto nivel político, en la instalación de una mesa de negociación entre ambos países condóminos de la empresa y a nivel de Gobierno y Técnicos en la materia” (ENRIQUÉZ GAMÓN, Efraín. Itaipú Binacional en una nueva dimensión histórica. Editorial Arandú. 2009. p. 37 y p. 38).
d. La mesa negociadora.
Resuelto por ambos gobiernos la conformación de una mesa negociadora para tratar los seis puntos planteados por el Gobierno paraguayo se integró la Comisión de Negociación para la Revisión y Cumplimiento del Tratado de Itaipú.
Por el Paraguay:
–Jorge Lara Castro, viceministro de Relaciones Exteriores; Samuel González, viceministro de Obras Públicas y Comunicaciones; Efraín Enriquéz Gamón, Consejero de la Itaipú Binacional; Hugo Ruiz Díaz, Asesor Jurídico de la Presidencia de la República; Jorge Rolón Luna, representante de la Cancillería ante el Consejo; - Ricardo Canese, Coordinador de la Mesa Negociadora, y Gustavo Codas, asesor para temas energéticos de la Cancillería. Fue notoria la ausencia del director general paraguayo Carlos Matero Balmelli.
Por el Brasil:
- Marcio Pereira Zimmerman, ministro interino de Minas y Energía; Enio Cordeiro, de la Cancillería, subsecretario general para la América del Sur; Luiz Eduardo Melía de Cavalho e Silva; jefe de Gabinete del ministro de Hacienda; Jorge Samek, director general brasileño de Itaipú; Válter Luiz Cardeal de Souza, director de Ingeniería Eletrobrás; João Bonifacio Cabral Junior, director jurídico de Itaipú; Antonio Otelo Cardozo, director técnico ejecutivo de Itaipú; Renato Soares Sacramento de la Eletrobrás; Marisete Fátima Daldad Pereira, del Tesoro Nacional Brasileño y Hailton Madureira de Almeida, Tesoro Nacional Brasileño.
En la segunda reunión de la mesa negociadora, llevada a cabo el 27 de octubre de 2008 con la participación en la delegación paraguaya de José Méndez Vall, estuvo ausente de Cavalho e Silva de Brasil. Estuvieron presentes también asistentes técnicos y personal de Secretaría.
- Enio Cordeiro de Itamaraty, sobre la libre disponibilidad, el precio justo y la deuda se reafirmó en nombre de su delegación la necesidad de dar cumplimiento al Artículo XIII del Tratado que establece que: “La energía producida por el aprovechamiento hidroeléctrico a que se refiere el Artículo I será dividida en partes iguales entre los dos países, siendo reconocido a cada uno de ellos el derecho de adquisición, en la forma establecida en el Artículo XIV, de la energía que no sea utilizada por el otro país para el propio consumo”. Parágrafo único: “Las Altas Partes Contratantes se comprometen a adquirir, conjunta o separadamente en la forma que acordaren, el total de la potencia instalada”. Cordeiro dijo que:
1) “No se presentaron elementos nuevos que sirvan de base para una profundización del tema (aún cuando sí aportaron nuevos elementos las subcomisiones de Energía y Deuda)”; 2) “No ven la posibilidad de exportar la energía a terceros países” (p.48). 3) “Esto es inviable porque Itaipú se hizo para el Brasil y el Paraguay; la integración energética sudamericana sólo podrá hacerse en el marco de un nuevo Tratado al nivel de Unasur; la alteración de las normas y prácticas vigentes es inviable que pueda pasar por el Congreso brasileño, recordando que el aprovechamiento hidroeléctrico tiene como objetivo y destino final dos países: Brasil y Paraguay” (p.49).
4) La delegación brasileña reiteró que: “…el Brasil hace la oferta de US$ un mil millones (mil millones de dólares) para contribuir a financiar un paquete de proyectos compartidos como: líneas de crédito, construcción de puentes y caminos, etc.,” (p.50) para beneficiar a la economía paraguaya.
- Efraín Enriquéz Gamón, consejero de Itaipú y principal portavoz de la reunión, del intercambio de ideas y planteamientos en las discusiones, infortunadamente dijo:
1) “Habría que recordar que el Brasil fue quien aportó los recursos para el financiamiento de la obra y otra hubiera sido la situación si el financiamiento fuese compartido. 2) la comisión ‘negociadora brasileña’ no tiene posibilidad ni atribución para renegociar el Tratado. Ambas partes deberán más bien tratar y expedirse sobre aspectos prácticos inmediatos. 3) Si bien la energía de Itaipú alimenta a un buen sector de la demanda energética brasileña (el 19% del total), Brasil no accederá en un corto plazo a la libre disponibilidad, ya que el consumo del mercado (especialmente de San Pablo y Río de Janeiro) incluye la parte de la energía cedida” (p.50).
- Sobre la infortunada intervención:
1) No es posible que el máximo vocero de la representación paraguaya ignore que Itaipú se financió a sí misma. Aceptar el discurso mentiroso, que Brasil financió la obra y que como una concesión graciosa compartió con Paraguay el aprovechamiento de Itaipú, denota un profundo desconocimiento del proceso que condujo a la forzosa asociación.
2) La construcción de la represa fue por iniciativa del Gobierno brasileño que para resolver su demanda energética, sin la participación paraguaya, llegó a recurrir en junio de 1965 a la solución militar invadiendo Puerto Renato, en territorio nacional. Como otra alternativa para la construcción unilateral del proyecto no se descartaba el desvío del curso del Paraná. Todas ellas jurídicamente inadmisibles.
3) Resuelto la controversia por la vía diplomática, gracias a intervención de los Estados Unidos, se decidió la construcción de la obra en el cauce del condómino río Paraná con forzoso involucramiento de Paraguay.
4) Entonces, era de estricta justicia el aval financiero brasileño. Todo ello, a cambio de la mitad de la producción para la margen derecha.
Debernardi y los negociadores sabían que el Paraguay no aportaría ni financiaría el proyecto de interés puramente brasileño. Reglas de juego.
El agua del río compartido y los daños de la inundación que expulsó de sus tierras ancestrales a más de treinta poblaciones nativas sumergiendo en el embalse el irrepetible Salto del Guairá, el bosque Atlántico con su rica fauna, eran aportes paraguayos más que suficientes por un miserable 7% del aprovechamiento.
Mentiras
Aceptar el discurso mentiroso, que Brasil financió la obra y que como una concesión graciosa compartió con Paraguay Itaipú, denota desconocimiento...
Invasión
Con la intención de excluir al Paraguay, Brasil recurrió en junio de 1965 inclusive a la solución militar, invadiendo Puerto Renato.
Desvío
Como otra alternativa para la construcción unilateral..., no descartaba el desvío del curso del Paraná. Todas ellas jurídicamente inadmisibles.
EE.UU.
Resuelta la controversia gracias a los EE.UU., se decidió construir la obra en el cauce del condómino río Paraná con involucramiento de Paraguay
juanantoniopozzo@gmail.com

domingo, 15 de noviembre de 2015

Una victoria sustentada en el robo

5 DE NOVIEMBRE DE 2015

| PARAGUAY APROVECHÓ MENOS DEL 7% DE LA ENERGIA EN 31 AÑOS

Itaipú Binacional, una victoria pírrica de la parte brasileña

El Tratado de Itaipú fue acordado entre los gobiernos de Brasil y Paraguay, en Brasilia, el 26 de abril de 1973. Salvo sus negociadores, nadie conocía el contenido del acuerdo.
 ABC Color se pudo enterar del borrador casi a la medianoche del 25 de abril de 1973. A medida que la opinión pública tomaba conocimiento del contenido del nuevo documento, quedaba explícito que el Acta Final de Foz de Yguazú de 1966 había sido pasado por alto.
Cabe señalar que el Acta Final de 1966 fue un convenio acorde con los intereses nacionales.
No obstante, los negociadores paraguayos del Tratado de Itaipú, Raúl Sapena Pastor, Alberto Nogués, Enzo Debernardi, Ezequiel González Alsina y Carlos Augusto Saldívar, sumisos a la directiva presidencial, no hesitaron en consensuar un compromiso nefasto para los intereses del Paraguay. No era para menos, entregaban al Brasil la principal riqueza industrial del país: la central hidroeléctrica Itaipú.
La inundación de unos 500 kilómetros cuadrados de territorio nacional; del maravilloso Salto del Guairá, una de las siete maravillas del mundo; de la Selva Atlántica con toda su fauna y flora y más de treinta poblaciones nativas que vivían del supermercado de la selva, no fue óbice para acordar el mamotreto.
El Tratado, redactado a escondidas del escrutinio público, no solamente violaba el acuerdo de Foz de Yguazú y la declaración del presidente João Goulart en “Tres Marías”, Mina Gerais, en 1964. También vulneraba sendas prescripciones constitucionales y resoluciones emitidas por la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Sin embargo, en contra de todo sentido común y para vergüenza de la bancada mayoritaria oficialista, fue ratificado por el Poder Legislativo que lo convirtió en Ley 389 de la República el 17 de julio de 1973.
El acuerdo entregaba la totalidad de la energía al Brasil, excepto una insignificante porción testimonial que le otorgaba visos de binacionalidad.
La producción generada por la usina a partir del río Paraná, que debiera ser repartida en partes iguales entre los socios condóminos mediante la sesgada aplicación del derecho de adquisición, fue derivada casi en su totalidad al Brasil. Menos del siete por ciento de la producción pudo aprovechar hasta ahora el Paraguay.
El precio justo por la cesión de la energía no utilizada fue transformado en el Tratado en una simple compensación. Una ocasional propina en agradecimiento por los servicios prestados que, no obstante, tenía que ser abonada por Brasil no ¡por Itaipú!
El Tratado también permitía a las Altas Partes, mediante protocolos o actos unilaterales, adoptar medidas en los ámbitos de “policía y seguridad”. No era más que la velada autorización para la intrusión inconstitucional de los brasileños en las áreas de los territorios bajo soberanía paraguaya.
Es menester recordar que la Constitución Nacional es puntillosa en el asunto al afirmar: “El territorio nacional jamás podrá ser cedido, transferido, arrendado, ni en forma alguna enajenado, aún temporalmente, a ninguna potencia extranjera …”( Art. 55 ).
La margen derecha, en virtud del Tratado, quedó como un apéndice de la empresa binacional Itaipú al bastardearse el objeto y fin del emprendimiento, que formulaba categóricamente que “… la energía producida por el aprovechamiento hidroeléctrico… será dividida en partes iguales entre los dos países” (Art. XIII).
El jurista Gustavo De Gásperi –el único hasta ahora– propuso una hoja de ruta para recuperar nuestra soberanía energética en Itaipú. No se conoce otra tesis que se le asemeje.
Infelizmente, los especialistas afines al sector hidroeléctrico poco pueden aportar. Ellos son abogados, ingenieros hidráulicos, ingenieros eléctricos u otros técnicos –parte del funcionariado activo del sector energético– que están vinculados por diversas razones a un Estado contratista, gobernado por políticos indiferentes a la defensa de los intereses nacionales. No obstante, son los escuchados por los gobiernos de turno. Cuando, desmadrados los abusos, critican la política oficial en la prensa escrita, ocultando sus perfiles para proteger su buen pasar.
Contadas son las excepciones a la regla, uno de ellos, un exmiembro del Consejo de Administración de Yacyretá que recientemente osó protestar por la venta ilegal de la energía a través de Garabí. El otro, que se atrevió escribir un ensayo sobre la escandalosa entrega de la soberanía energética al Brasil, también terminó siendo despedido de Itaipú. Hay otros pocos más, tratados como “opinólogos”.
Preguntado un representante del Consejo de la Magistratura sobre la inconstitucionalidad de la ley que transparenta las binacionales, declarada por la Sala Constitucional de la Corte, la respuesta no dejó lugar a dudas: es más importante la estabilidad laboral en las binacionales de los vástagos y recomendados de la alta magistratura, que los intereses nacionales conculcados.
De Gásperi, en sus escritos y conferencias, demostró suficientemente que el fin y el objeto del Tratado de Itaipú fue desviado de su concepción original a causa de la mala fe de sus redactores. Gracias a ello y a nuestros abyectos negociadores, advertía, que en vez del reparto equitativo entre las partes de la producción energética la totalidad, excepto una mínima porción, fue destinada al Brasil. También razonaba que al violarse la buena fe del objeto y fin del Tratado este podría ser anulado conforme a la Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados. Dictaminada la nulidad del Tratado por la Corte Internacional –sustentada en el dictamen– es posible demandar en el Paraguay, de conformidad con el Código Civil paraguayo, a la multinacional brasileña Eletrobrás. Una multinacional –cuyo presidente purga prisión– complicada en bochornosos hechos de corrupción, demandada por sus accionistas y que sigue cobrando a Itaipú una deuda suficientemente honrada. ¡Basta de dañar al Paraguay!
Por todo ello, sentenciaba De Gásperi, es preciso analizar si cabría o no demandar a la Electrobrás SA en el Paraguay aplicando el Artículo 1201 de nuestro Código Civil. Es a través de esta sociedad anónima que se permitió la fuga de nuestra energía. Desde luego, habría que deducir lo que el Paraguay recibió en concepto de cesión de su energía.
El artículo 1201 de nuestro Código Civil dispone: “La citación y emplazamiento de una sociedad constituida en el extranjero pueden cumplirse en la República en la persona de su representante general o del apoderado que intervino en el acto o contrato que origine el litigio”, alegaba el notable jurista, de feliz memoria, Gustavo De Gásperi.
Treinta y un años después, la prensa escrita difunde que Itaipú alcanzó un hito mundial de producción de energía.
La represa Itaipú, dice el comunicado, alcanzó un hito mundial con una producción de 2.300 millones de megawatios hora (MWh) de energía acumulada en 31 años de funcionamiento. El director paraguayo de la binacional, James Spalding, destacó que la hidroeléctrica produce energía limpia a partir de las aguas del río Paraná, evitando la contaminación del medioambiente que producen otros sistemas.
Lo que no destacó Spalding en su triunfalista discurso (también el directorio y el consejo de administración) es que de esa descomunal cifra solo el 7% pudo ser aprovechado por la margen derecha. Aun así, por el monumental engaño, Itaipú no deja de ser una victoria pírrica brasileña.
Violación
El Tratado, redactado a escondidas del escrutinio público, violó el acuerdo de Foz y la declaración del presidente Goulart en “Tres Marías” de 1964.
Además
El documento también vulneraba prescripciones constitucionales y resoluciones que emitió la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Entrega
El acuerdo entregaba la totalidad de la energía al Brasil, excepto una insignificante porción testimonial que le otorgaba visos de binacionalidad.
juanantoniopozzo@gmail.com

sábado, 7 de noviembre de 2015

Confiamos en que los estudiantes puedan incluir en su agenda la reivindicación de las hidroeléctricas binacionales

08 DE NOVIEMBRE DE 2015


Las binacionales hidroeléctricas y el “primaverazo estudiantil”

a. La revolución árabe es considerada la primera gran oleada de protestas democráticas de los países árabes en el siglo XXI, independiente de toda confesión religiosa. Las protestas de índole social, en el caso de Túnez con apoyo del ejército, fueron ocasionadas por la falta de empleos en una población agobiada por un régimen plagado de funcionarios corruptos.
Según los analistas, estos regímenes provenientes de los nacionalismos árabes, entre los años cincuenta y setenta, se fueron convirtiendo en gobiernos represores y corruptos, que sin oposición política fueron creando vacíos de poder oportunamente llenados por movimientos islamistas.
Las malas condiciones de vida, el desempleo, la injusticia, la carencia de libertades y de infraestructuras beneficiaban solamente a una cúpula poderosa y rapaz.
¿Por qué no ocurrieron antes? Es probable que durante la Guerra Fría los países árabes tuvieran supeditados sus intereses nacionales a los de las superpotencias que pugnaban por la hegemonía global.
Con la caída del muro de Berlín, salvo excepciones, se amplió la libertad política en coincidencia con el proceso de globalización que difundió las ideas occidentales en las redes sociales, vía internet. La red implementó su significativa presencia en el siglo que se iniciaba gracias a los planes de desarrollo de la Unión Europea.
La mayoría de los manifestantes eran jóvenes –que en Egipto fue rotulado como la revolución de los jóvenes– con estudios básicos, superiores y terciarios con acceso a internet.
La Primavera Árabe es como una segunda rebelión árabe, heredera de la corriente anticolonialista de 1968, infructuosa en su momento aunque ahora resurge como parte fundamental de los movimientos mundiales de protestas.
b. En la experiencia paraguaya, con el “primaverazo estudiantil” del año 2015, se repetía una larga historia iniciada antes de la Guerra del Chaco.
Concluido el conflicto bélico, que remangó con éxito hasta los límites arcifinios del Chaco al aguerrido ejército boliviano, el ambiente social en Paraguay perdió su habitual calma. Contribuían para ello el expandido movimiento obrero paraguayo, desde los años veinte, dividido entre sus dos tendencias históricas: la anarquista y la socialista. Los primeros, defensores a ultranza de la libertad sobre cualquier autoridad, se encontraban agremiados en el Centro Obrero Regional Paraguayo; los otros, con propuestas para administrar los medios de producción por los trabajadores, estaban aglutinados en la Unión Gremial del Paraguay y sus sindicatos emblemas: la Liga de Obreros Marítimos y la Asociación Ferroviaria.
Otros grupos prestaban su colaboración. Se destacaban entre ellos los estudiantes, identificados con las ideas de la Reforma Universitaria de la Argentina, que lograron, en 1923, ocupar la dirección de la Federación de Estudiantes del Paraguay.
Como resultado de la presión estudiantil, el gobierno liberal reformaría en 1929 la Universidad siguiendo el modelo de las universidades argentinas cuyos estudiantes disputaban el poder a los docentes universitarios. El ideario reformista estudiantil rápidamente cundió en los sectores juveniles constituyéndose en un vigoroso movimiento cívico de oposición al gobierno liberal de José P. Guggiari (1928-1932).
Conocido como “Nuevo Ideario Nacional”, convocó a la unidad de los obreros con los estudiantes para participar en mítines y huelgas. También exaltaba un socialismo humanista que, sin una clara orientación respecto a sus objetivos sociales y políticos, se fue diluyendo de a poco.
c. En setiembre de este año los estudiantes de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), luego de precipitar la renuncia de su rector Froilán Peralta, no cesan de activar.
El movimiento estudiantil más vigoroso que nunca, hastiado de sus autoridades corruptas, con la consigna #UNAnoTeCalles decidió presionar hasta que se logre la reforma estatutaria.
La crónica de la rebelión señala que después de la renuncia del acusado como corrompido rector, se realizó una multitudinaria Asamblea General de la UNA. Otras asambleas, fueron realizadas en las facultades Politécnica, Economía y Veterinaria.
En la Facultad de Derecho, pese a algunos incidentes, se pudo llevar a cabo con éxito el evento en el que se pidió la dimisión del decano Antonio Fretes.
No fue suficiente para los estudiantes, hastiados de promesas mentirosas, que el ahora presidente de la Corte, Fretes, prometiera, en el periodo 2015, trabajar con responsabilidad, honestidad y empeño encarando una lucha frontal contra la morosidad.
En la Asamblea General del domingo 4 de octubre se decidió rechazar la intervención del Cones –órgano estatal encargado de regular la educación superior– por su falta de credibilidad y su vinculación con el Gobierno. En la ocasión exigieron al Consejo Superior Universitario aceptar la renuncia del inefable Peralta.
Con su renuncia, quedó como rector interino Ricardo Meyer, de Arquitectura, uno de los decanos no oficialista. No obstante, la toma y la movilización siguieron sin solución de continuidad.
Las sedes de Derecho, Sociología y Politología, Filosofía, Medicina e Instituto Superior de Lenguas, fuera del campus, también fueron ocupadas.
Los auspiciosos resultados de la lucha estudiantil se concretaron con las renuncias de Froilán Peralta, rector; Andrés Amarilla, vicerrector; Antonio Rodríguez, decano de Economía; Isacio Vallejos, decano de Ingeniería; Juan Gualberto González, decano de Veterinaria; Ruben Di Tore, decano de Odontología; Aníbal Peris, decano de Medicina, uno de los más cuestionados. De momento, la movilización sigue, y la decana de Filosofía, María Angélica González, pese al desprecio estudiantil, se resiste a renunciar.
Los manifestantes también piden la remoción de la vicedecana Gladys Ríos y todo el Consejo Directivo por apañar hechos de corrupción y manejos autoritarios de la decana.
Los ciudadanos apoyan vigorosamente a los jóvenes que, desde la universidad encarnan el hartazgo de la ciudadanía ante tanta cachafacería de las autoridades universitarias.
Desde el 9 de octubre, Abel Bernal es el nuevo rector de la UNA. Sin embargo, el Ministerio de Hacienda no liberaría los fondos para salarios e insumos del Hospital de Clínicas cortando el proceso de discusión y elección de los mejores perfiles propuestos. Los estudiantes como respuesta advirtieron al presidente Cartes “Ahora vamos por vos”.
También en las binacionales
d. Este esperanzador despertar juvenil estudiantil –que abochorna a los abúlicos mayores, carentes de voluntad y energía– debiera incursionar también en las hidroeléctricas binacionales, las principales riquezas del país.
En efecto, sentados sobre una montaña de dinero –indiferentes a las sesudas recomendaciones del célebre economista Jeffrey Sachs del Columbia Vale Center, de la Contraloría General de la República y de la Comisión de Entes Binacionales Hidroeléctricos de la Cancillería nacional, hoy desactivada– , hoy somos mendigos de nuestra riqueza.
Con pavoroso silencio, admitimos que la errática emisión de bonos soberanos endeude hasta el 2045 a las generaciones futuras. Todo ello, para pagar deudas adquiridas por un gigantismo estatal sustentado en un enfermizo nepotismo.
Sin embargo, abrigamos la esperanza, aunque vergüenza nos dé, que el “primaverazo estudiantil” sea un indicador válido que presagie un cambio que los obtusos gobiernos árabes de Túnez, Libia y Egipto no supieron percibir a tiempo. Lo mismo ocurrió, por no entender las señales de los nuevos tiempos, al caduco gobierno derribado estrepitosamente el 2 y 3 de febrero de 1989.
Es importante advertir que sin una clara orientación respecto a sus objetivos sociales y políticos, el movimiento estudiantil no podrá sostenerse en el tiempo, lo que más les sobra a estos intrépidos funcionarios más identificados con el crimen organizado que con los intereses de la nación.
La entrega de nuestra soberanía energética a nuestros socios condóminos debe parar. Entre tanto, es menester zarandear el árbol de frutos podridos, como lo hicieron los jóvenes de la Universidad Nacional de Asunción, para acabar con la corrupción entreguista enseñoreada en las hidroeléctricas binacionales de Itaipú y de Yacyretá.
Historia
En la experiencia paraguaya, con el “primaverazo estudiantil” del año 2015, se repetía una larga historia iniciada antes de la Guerra del Chaco.
Contagiar
El despertar juvenil estudiantil –que abochorna a los abúlicos mayores– debería incursionar también en las binacionales, las principales riquezas del país.
Juanantoniopozzo@gmail.com