26 DE JUNIO DE 2017
| CONCLUYE MAÑANA EL CICLO DE AUDIENCIAS PÚBLICAS “ITAIPÚ, HAGAMOS PATRIA”Indigna que no se busque recuperar soberanía en binacionales, dijo Pozzo
Hubo preguntas, cargadas de indignación; cuestiona ron la falta de políticas tendientes a recuperar nuestra soberanía en Itaipú, señaló el general (R) Juan A. Pozzo al evaluar, en una entrevista con ABC, las audiencias “Itaipú, hagamos patria”, que tuvieron lugar en ciudades del interior del país.
–La iniciativa de algunos senadores de concienciar al país acerca de los derechos paraguayos en Itaipú mediante audiencias públicas, ante el inminente vencimiento del plazo de 50 años que establece el Anexo C del Tratado de Itaipú para “revisar” sus disposiciones es plausible. Pero lamentamos que no sea toda la Cámara e incluso todo el Legislativo el que impulse esta actividad.
–Sin embargo, el arranque es fundamental en todo emprendimiento, que en esta campaña, apelando al discurso transparente difundido en toda la República, buscamos dejar al descubierto la estafa ocasionada al Paraguay en Itaipú. Sin dudas, una razón suficiente para convocar a todo el Poder Legislativo en la impostergable tarea de la recuperación de nuestra soberanía energética.
“Itaipú, hagamos patria” surgió de las comisiones permanentes de la Cámara de Senadores lideradas por Miguel López Perito y Arnoldo Wiens. La iniciativa, apoyada por otros congresistas y por el propio titular del Senado, Roberto Acevedo, promovió, en audiencias públicas, la activa participación ciudadana, y de los estudiantes universitarios, en particular. Está previsto que para este martes concluya la primera etapa en la Sala Bicameral del Congreso, para dar a conocer los principales reclamos de la gente.
–Sabemos que entre los impulsores y ejecutores del proyecto también figuran investigadores y técnicos del sector energía; no obstante, una vez más, debemos lamentar que solo sean algunos de ellos los que se comprometieron con este emprendimiento.
–Ocurre igual que con los abogados. Los más caracterizados están vinculados con la defensa de los intereses de las binacionales hidroeléctricas. Por desgracia, el Estado paraguayo sigue siendo un convidado de piedra, arrinconado, en beneficio de aquellos que lo aborrecen.
–Las audiencias se llevaron a cabo en diferentes ciudades del interior del país. Sabemos que usted estuvo como expositor en todas ellas; ¿pudo medir el interés de nuestros compatriotas en este tema que muy pocos comprenden pero que afecta a toda la República?
–En las universidades, en un ambiente propicio, se desarrollaron las exposiciones, y los estudiantes, docentes, directivos y participantes las siguieron con inusitado interés. Fue gratificante para los expositores, quienes percibieron el deseo del público de conocer, de aprender sobre esta realidad desconocida del que depende su futuro. En las preguntas, cargadas de indignación, se cuestionaba la falta de políticas tendientes a recuperar nuestra soberanía nacional en Itaipú. La indiferencia cómplice ante la continuidad del statu quo, desechando inclusive los estudios científicos que demuestran nuestros justos reclamos, atribuyeron a la profunda corrupción imperante y que sigue inficionando gravemente, como lo afirmaba en su oportunidad monseñor Ismael Rolón, de feliz memoria, el tejido moral de la nación.
–¿Qué sectores de estas ciudades del interior se mostraron más abiertos, más interesados, más inquietos con relación a las propuestas que ustedes hicieron en cada audiencia los panelistas?
–En Salto del Guairá, por ejemplo, pesa mucho la inequidad en la distribución de los “royalties” y “compensación en razón del territorio inundado”, al no acabarse de resarcir a la comunidad por el perjuicio que les ocasionó la desaparición de las cataratas del Salto del Guairá.
Las propuestas de los panelistas, tanto en las universidades de Concepción y Pedro Juan Caballero como en Ciudad del Este, Caacupé y Guairá impactaron más, en todos los casos, en los estudiantes (y también en no pocos docentes), que no podían comprender el porqué de tanto abandono y temor para corregir las injustas asimetrías que sufre nuestro país en la principal riqueza industrial con que cuenta. Una vez instalada la preocupación, para la “revisión” del 2023, es posible esperar un cambio más comprometido con la patria.
–Según la experiencia que recogió en estas jornadas, ¿haría otras propuestas para que los reclamos paraguayos en las binacionales forme parte de la agenda diaria del pueblo e incluso acompañe y controle las gestiones de su gobernantes de turno, por ejemplo, las actuales en Yacyretá y las que habrán de iniciarse el 13 de agosto de 2023?
–Pareciera que nuestros gobernantes tienen un temor atávico en abordar los temas relacionados con las binacionales hidroeléctricas. Por ello valoramos aún más la actitud honrosa de los senadores Miguel López Perito y Arnoldo Wiens.
Pese a que estamos cerca de las elecciones de 2018, no escuchamos en los discursos de los postulantes a la primera magistratura una política clara ante este insólito sometimiento. Tal vez pueda explicarse en la histórica conformación, luego de la desastrosa guerra, de los partidos tradicionales condicionados hacía el Río de la Plata o hacía el Este lusitano.
No obstante, es tiempo de desperezarse y actuar como paraguayos. Lamentablemente, lo que nuestra generación no pudo lograr, trasladamos, con sentida vergüenza, a los jóvenes de la patria, que sí saben de movilizarse para deshacer entuertos. Lo demostraron cuando sacaron de circulación a sus autoridades rectoras y cuando consiguieron apartar a su ministra de Educación. Con esta perspectiva, sin dudas, será más auspiciosa la mesa de negociaciones del 2023 para definir el futuro del Paraguay.
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